DEUDAS

T
Te debo un café 
Y mis canas sobre tu almohada
Un sin fin de silencios
Y un mar de absurdas risas
Vacaciones en carretera 
Una noche de bodas 
Con una canción de Sabina.
Te debo un poema
Con un verso por cada letra de tu nombre
Cien desayunos en cama 
Una segunda luna de miel veinte años después
Un “ feliz no San Valentín “
Nuestra foto en el librero
Tres niños destrozando tu sala.
Te debo cien masajes en tu cansada espalda
Los domingos frente al televisor
La fecha de nuestra unión en mi muñeca tatuada.
Las sábanas mojadas cualquier día a las dos de la mañana
Te debo tu tranquilidad en los días pesados
Mil besos en la enfermedad 
Mil abrazos de los buenos días
Fruta fresca por la mañana
Y sábados de pizza.
Te debo en libro de memorias
Con fechas horas y palabras exactas
Y un álbum familiar con cientos de fotografías.
Las caricias a tus canas 
Los besos a tus cicatrices
Un souvenir juntos en París
Nuestros nombres en el cristal empañado de la casa de descanzo
Una corona adornada con los cristales que quitaste de mis pies
Los mejores recuerdos de lo último de mi juventud.
Te debo mi mano sosteniendo la tuya
En cada caída , en esquina
Y mi sonrisa en cada triunfo tuyo
Los viernes por la noche visitando a tu madre
Café caliente y pastel para tus amigas.
Te debo algunos paseos con el perro 
Te debo un amanecer en una playa escondida
Te debo un detalle sorpresa esperando en tu trabajo.
¿ qué te digo? Te debo una vida

Porqué el mundo está loco
Yo necesito de tu risa
Porqué a veces arde mi alma
Y otras veces fluye en una suave brisa;
Porqué me pierdo en versos
Creando un mundo ficticio
Mientras la realidad
Es un hembra incompresible
Colgando a un hilo de tu risa.
Porqué la levedad de mi ser
Flota en tus ojos
Cuando miras ese infinito
Que no sabes que brota de tus labios.
Porqué en ti el tiempo no me importa
Pues cada segundo es una plena eternidad
Ni el efecto de gravedad en tu cuerpo
Porqué termina en ti mi búsqueda espiritual
Y sos mi dogma, mi altar, mi verdad y mi fe.
Porqué al escucharte
Floto
Y en tus palabras me pierdo
Para reencontrarme en el paraíso
Donde tu orgasmo
Alinea un universo a mi favor.
Porqué te quiero
Te necesito
Porqué me da la gana
Porqué con tu cuerpo cubro mis abismos
Y de tu ser emana mi esencia.

Aquí no hay nada:
Solo tu imagen encantado empolvados espejos
Tu soledad por rutina compartida
Un vacío sofocante
Los restos de comida
Las botellas vacías
Las ojeras en tu rostro
La tristeza en mis ojos
El recuerdo de un fingido orgasmo
Y de sonrisas “a webo”
Un retrato mutilado en la última discusión.

No hay nada;
Solo silencios a veces opacados por Mozart
Un poema inconcluso en la pared
El teléfono que nadie quiere contestar
Los libros de mi otra amante
La rosa de “solo un amigo “
La indiferencia mutua
La duda
La abstinencia
La rabia
El asco
La frustración de dos que decían amarse.

La lista para elegir
El nombre de los hijos no nacidos
El álbum familiar vacio
Documentos en que tu apellido con el mío ya no complementas
El plato del gato perdido
La jaula del ave que libere de tu secuestro.

Aquí no hay nada:
Solo tú
Que prácticamente no estas
Y yo
Que ya no sé si soy, si estoy, si existo.

CUANDO TÚ NO ESTAS

Cuando tú no estas

Todo es tan vació

Mis entrañas y  mi alma

Arden tanto

Que defeco cenizas.

Sin tu reflejo tras el mío

Mi rostro luce tan insulso

Y el espejo tan triste.

El café es tan insípido

Me faltan palabras

Me sobra  frío.

No hay poesía  ajena

Que valga más que una mentira

Y el mundo allá  afuera

Me importa tan poco como la sátira política .

No sé si es esquizofrenia

Pero mi cama grita tu nombre

Mientras el móvil calla

Aumentando mi pequeña agonía.

Y fumo como loco

Y bebo otro poco

Y escribo un verso y otro

Y arranco otra hoja a la libreta.

Mis manos solo quieren acariciarte

Y  No me conformo

Con follarme tu recuerdo.

Cuando tú no estas

Hablar me raspa jodidamente la garganta

Mis poros sangran frustración

Y sudo frío, tan frío

Que tiemblo

Bajo el manto del olvido.

Tengo una enfermedad

Que solo tiene como cura

Un frasco de bonitas memorias

Etiquetadas con tu apellido

Y me auto médico

Buscando la sobredosis.

Cuando tú no estas

Adorno el  librero

Con tu busto hecho de plastilina

Que me digan loco,

Me importa un comino

Y después de tanto tiempo

Este sentir se vuelve tan absurdo

Cuando miro el puto reloj

Y me entero que fue apenas

Hace cinco minutos

Que estuviste conmigo.

QUÉDATE

Quédate,
Adéntrate en mi pequeño mundo
En mis jardines prohibidos,
Mis sueños,
Mis sentires.

Quédate
Quiero que llegue ese punto
En que te encuentre en cada canción
Y te recuerde entre las líneas de Benedetti.

Quédate
Que quiero un día despertar
Viendo tu cabello reposando en mí pecho
Y decirme a mí mismo
“como ha pasado el tiempo”.

Quédate:
Quiero seas
La razón de mis risas
Sueños, tomentos
Mi musa
La imagen escondida en cada uno de mis textos.

Ahí están, no se han ido ni se irán:

La sombra de mis dedos reflejada sobre tu blanda espalda

La marca de mis labios sobre cada lunar tuyo

El recuerdo  en tus caderas del éxtasis por mi provocado

Mi mirada nadando las olas de tu cuerpo

Mis perversiones explorando tu relieve

Las palabras que tatuó sutilmente bajo tu piel

Ahí sigue, en tu cuerpo, mi todo

HOY

Hoy que no estás duele Sabina, duele Neruda, Nocturno ya no es para Rosario, duelen las horas, tu ausencia, tu esencia, duelen las letras que fluyen y fluyen, el aire en mis ojos, duelen la noche y la Luna, duele cada sorbo de café, duelen mis libretas empolvadas, mis plumas secas, mis alas, mis cadenas. Duele el crucifijo, el espejo, mis arrugas, la planta del pie, el torso, mis canas. Duelen las risas forzadas , las cartas no escritas, las canciones no dedicadas. Duelen las cursilerías adolescentes en cristales empañados, duele el frío sin tu cuerpo a mi lado,l a ausencia de Dios y la falta de pecado.